viernes, septiembre 21, 2007

Título

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Las cinco y tantas de la madrugada. ¿Hoy?. Hoy he jugado un partido, hemos perdido, he metido un punto el cual he dedicado a mi madre. Me duele el codo. Sudo en mi habitación. Estoy en gallumbos y escucho ThomYorke. Creo que es un buen momento para escribir.

Había algunos videojuegos antiguos de plataformas, esos de ir dando patadas por ahí manejando a un tío de tirantes blancos o a una tia con las tetas grandes y el pelo azul, en los que a tu personaje le daban un numero limitado de superpuñetazo o superpatada que te quitaban algo de vida cuando lo hacía pero que mataba a todo aquel que anduviera cerca. No había cosa que más jodiera que te mataran o acabarte la pantalla y no haber usado el superpoder.

Cambio y pongo algo de Head Automatica. Bebo de la botella de agua de color naranja que hay encima de la mesa. Aún le queda cierto regustillo a sensación de melocotón. Sigo en calzoncillos.

Somos personas, tenemos necesidades. No me fío de las personas que no odian, que todo les parece de puta madre. No. Tampoco me fío de aquel tío con el que charlando durante un buen rato no me transmite la sensación de que en un corto espacio de tiempo le podré dar un codazo amistoso para decirle “ostias! Mira esa que pasa por ahí!”. Me fiaría antes del Señor Burns que de Ned Flanders.

Bebo agua. Pongo Standstill por enésima vez hoy. Sigo en calzoncillos.

Poco más de un mes y ya tendré veintitrés años. Sigo bebiendo KalimoTXo por bares de Malasaña. Veintitrés. Creo que los veintitrés es esa edad en la que cuando tu dices “me estoy haciendo mayor” como muletilla de mierda después de que te feliciten, la gente ya empieza a ser más escéptica a la hora de decir “andaa, que dices!”. O quizá solo es la edad en la que empiezas a usar la palabra escéptica.

Viernes 21 de Septiembre, se acercan las seis de la madrugada. La mañana ya llegó, hoy puede ser un gran día. Sigo escribiendo tonterías y además se me acaba el agua.





A través de tu risa la vida me pide perdón.

Vivalaguerra.

4 comentarios:

Zalo dijo...

Siempre he desconfiado de la gente que le cae bien a todo el mundo. Seguro que en algún rincón del mundo hay alguien odiándote incluso a tí, Currelas, y mira que lo veo difícil...

Debiste usar el superpoder cuando te estaban breando, no guardártelo para el monstruo final...

Anónimo dijo...

Ni de señores Burns ni de Neds Flanders... mejor no fiarte. Así, a secas. Te evitas sorpresas.

Qué os ha dado a todos con este grupo?

Anónimo dijo...

Curro, la de pelirrojo con un parche es tu hermana??????

Head Automatica power

Anónimo dijo...

me he puesto palote visualizandote en gayumbos,a ver cuando quedamos